Generalmente, la mayoría de propietarios de automóviles nuevos tendrán que reemplazar su suspensión o amortiguadores después de unos cinco años.
Pero si se ha estado usandose de un modo salvaje y sin preocuparse demasiado, es posible que se deba cambiar el amortiguador u otra pieza de la suspensión neumática mucho antes.
Aquí le damos cuatro consejos esenciales que pueden ayudar a que la suspensión o amortiguación de su coche dure un poco más.
1. MODERACIÓN ANTE LOS BADENES
Los badenes, aunque no lo parezca, tiene una función específica y es evitar que sobrepases un límite de velocidad imponiendo una barrera física, aunque a menudo se piensa que solo están ahí para perjudicarnos y rompernos el coche.
Estos badenes o topes de velocidad son molestos, especialmente cuando van seguidos uno detrás de otro.
Te aconsejamos que tengas especial cuidado al pasar por estos badenes, ya que si pasas a una velocidad elevada, no solo pondrás en peligro tu seguridad y la de los que te rodean, si no que es un golpe directo al sistema de suspensión del vehículo.
2. NO SOBRECARGUE EL COCHE
Nosotros vemos la suspensión neumática, como las piernas de su coche, si quiere que duren sanas en buen estado por mucho tiempo, no se recomienda cargarlas al extremo, ya que esta sufre, especialmente la suspensión neumática que siempre intenta estabilizar el vehículo a un mismo nivel.
Ya sea que se trate de demasiado equipaje o demasiados pasajeros en el asiento trasero (todos hemos visto coches con seis o siete en la parte trasera), sobrecargar su automóvil también sobrecarga los amortiguadores.
Además,de ser nuevamente un gran riesgo para la seguridad, aumentará drásticamente su distancia de frenado. Y si tiene más pasajeros que cinturones de seguridad, podría ser fatal.
3. EVITE LOS BORDILLOS DE LAS ACERAS
Golpear bordillos no solo daña las ruedas y las llantas. También puede estropear tu suspensión.
Subirse a los bordillos repetidamente puede desequilibrar la alineación de las ruedas y/o la inclinación.
Por esto le aconsejamos evitar los bordillos al máximo si desea que la suspensión de su automóvil dure un poco más.
4. ¡CUIDADO CON LOS BACHES!
Además de arruinar tu viaje y la conducción, los baches harán que muchas cosas se salgan de control si sigues conduciendo a través de ellos.
Sin embargo, detectar los baches no siempre es fácil, especialmente por la noche. Un buen truco es prestar atención a los coches que van delante.
Tanto si evitan algo como si los ves templar o pasar una resalte, ya te harás una idea del tipo de obstáculo que te viene de cara.
